¿Notas a tu cachorro mordisqueando todo, babeando más de lo normal o encontrando pequeños "regalos" en el suelo? ¡Es muy probable que tu perro esté mudando de dientes! Este es un proceso natural y fundamental en su desarrollo, pero puede generar muchas dudas en los dueños. En esta guía completa, te explicaremos cómo detectar las señales de que tu perro está mudando sus dientes, a qué edad ocurre este cambio, cuánto dura esta etapa y, lo más importante, qué puedes hacer para ayudarlo a transitarla de la mejor manera.

La muda de dientes en perros es un hito importante en la vida de tu cachorro. Aunque cada perro es diferente, hay señales comunes que te indicarán que este proceso va a suceder. Presta atención a estos indicadores:
Una de las señales más evidentes es un aumento significativo en la necesidad de morder. Tu cachorro muerde todo lo que encuentra a su paso: muebles, zapatos, tus manos… Esto no es por mal comportamiento, sino una forma instintiva de aliviar las encías del perro que sienten presión y picazón. Es crucial redirigir esta conducta hacia objetos adecuados para evitar daños en casa y en su boca. El dolor de dientes en cachorro es real, y la masticación les proporciona un alivio temporal.
No te alarmes si encuentras pequeñas manchas de sangre en los juguetes de tu perro o incluso en su cama. Esto es normal y se debe a la caída de los dientes de leche del perro. De vez en cuando, podrías incluso encontrar un diminuto diente caído de cachorro en el suelo. La mayoría de las veces, los perros se tragan sus propios dientes de leche, lo cual es completamente inofensivo. Observar las encías del perro también puede darte pistas: estarán más enrojecidas o inflamadas de lo habitual.
Durante la muda, es posible que notes un ligero mal aliento en el cachorro. Esto se debe a la inflamación de las encías y a la presencia de bacterias. Si el olor es muy fuerte o persistente, consulta a tu veterinario. Además, el perro no quiere comer con la misma energía de siempre o parece más quisquilloso con su comida.
El dolor y la sensibilidad en la boca pueden hacer que la hora de la comida sea incómoda.
Un cachorro que está mudando sus dientes puede estar más irritable, llorón o menos juguetón de lo habitual. El malestar constante puede hacer que un perro irritable o un cachorro que llora sin razón aparente sea una señal de que sus encías le están molestando. Ten paciencia y ofrécele tranquilidad y distracción.
Entender la cronología de la dentición canina te ayudará a saber qué esperar y cuándo.

Los cachorros nacen sin dientes. Sus primeros dientes de cachorro, conocidos como dientes de leche o deciduos, comienzan a aparecer alrededor de las 3 a 6 semanas de vida. Estos son pequeños y afilados, perfectos para empezar a mordisquear. Alrededor de las 8 semanas, ya deberían tener su set completo de 28 dientes de leche.
Saber cuándo salen los dientes del perro te dará una idea de cuándo comenzará la siguiente fase.
El verdadero proceso de cambio de dentadura del perro comienza generalmente entre los 3 y 4 meses de edad y se extiende hasta los 6 o 7 meses. Durante este periodo, los 28 dientes de leche son reemplazados por 42 dientes permanentes del perro. Los nuevos dientes empujan a los de leche, haciendo que se aflojen y caigan.
Este proceso de muda dental es gradual y ocurre en un orden específico, comenzando por los incisivos, luego los caninos y finalmente los premolares y molares. La edad de los dientes del perro es un indicador clave de su desarrollo.
La etapa de dentición completa, desde que empiezan a caer los primeros dientes de leche hasta que todos los dientes permanentes han erupcionado, puede durar entre 3 y 4 meses. Sin embargo, la duración de la muda de dientes del perro puede variar ligeramente según la raza y el tamaño del cachorro. Es un periodo que requiere mucha paciencia y comprensión por parte de los dueños.
Ahora que sabes cómo detectar la muda y cuándo ocurre, es fundamental saber cómo ayudar a tu cachorro a sentirse más cómodo.
Proporcionar al cachorro juguetes para morder es esencial. Opta por mordedores para perros diseñados específicamente para la dentición, hechos de goma resistente o silicona. Estos juguetes no solo alivian la presión en sus encías, sino que también desvían su atención de tus muebles.
Evita objetos demasiado duros que puedan fracturar sus dientes o dañar sus encías. El alivio de encías es su principal necesidad en este momento.
Si tu cachorro muestra molestias al comer, puedes humedecer sus croquetas con un poco de agua tibia para ablandarlas. Ofrecer comida húmeda para cachorro puede hacer que la hora de la comida sea menos dolorosa. Otra excelente opción para aliviar el dolor de dientes del perro es darle cubitos de hielo (supervisado) o zanahorias congeladas. El frío ayuda a desinflamar y adormecer las encías.
Aunque tu cachorro esté mudando dientes, es un buen momento para acostumbrarlo al cepillado dental. Usa un cepillo de dientes suave para perros y una pasta dental específica para ellos. Realiza movimientos suaves y cortos. Esto no solo contribuye a la salud bucal canina a largo plazo, sino que también te permite realizar una revisión dental del perro de forma regular para detectar cualquier anomalía.
En la mayoría de los casos, la muda de dientes es un proceso natural y sin complicaciones. Sin embargo, hay situaciones en las que la visita al veterinario es crucial. Si observas sangrado excesivo, mal aliento muy fuerte y persistente, hinchazón severa, o si notas que un diente de leche retenido no se cae a pesar de que el diente permanente ya ha erupcionado, es momento de consultar a tu veterinario.
Los problemas dentales del perro pueden requerir intervención profesional para evitar complicaciones futuras. Una revisión dental post-muda también es recomendable para asegurar que todos los dientes permanentes han salido correctamente.